La tecnología wearable y la nueva generación de intervinientes
Durante años una de las principales preocupaciones en una intervención ha sido saber dónde estaban los recursos, especialmente los bomberos al actuar en el epicentro de un incendio, un derrumbamiento, etc. Podríamos recordar alguna intervención importante en España en que ante la «pérdida» de unidades de bomberos se ordenó evacuar y reagruparse, abandonando la extinción y favoreciendo por tanto el desarrollo del incendio.
La pregunta por radio desde el Centro de mando de: «Están todos los bomberos? ¿Tienes a toda tu gente?» podía resultar positiva, pero ¿Dónde está esa gente?. Quizás ni ellos mismos lo supieran. Este hecho siempre ha sido un asunto de máxima seguridad no resuelto. Durante años la tecnología ha tratado de afrontarlo sin mucho éxito.
Cuando un bombero está en una intervención no está para tomar fotos, notas, ni enviar mensajes a través de teléfonos, IPad o cualquier otro equipo de este tipo, muchas veces ni para utilizar la radio. La famosa respuesta de «estamos trabajando», muchas veces incomprendida, está más que justificada.
Ahora la tecnología ha tomado un rumbo que va a dejar atrás dispositivos como tablets, portátiles, etc. con gran rapidez. La aplicación de la tecnología wearable a los primeros intervinientes: bomberos, policías, sanitarios, etc. va a cambiar radicalmente las técnicas de intervención.
Hasta ahora los wearables consistían en dispositivos a llevar encima o colgarse en el cuerpo: pulseras, dispositivos, etc. Pero podíamos acostumbrarnos a ello o no, a lo que si estamos todos acostumbrados es a llevar ropa. Según la mesa redonda Smart services, smart production, smart textiles, organizada por Eurecat, centro tecnológico de Catalunya, el resultado de la nueva generación de wearables domésticos será un híbrido entre tecnología y textil, que combinará las funciones inteligentes con los gustos en la forma de vestir.
Hasta ahora la ropa de intervención era de protección, ahora también será de información. La nueva tecnología busca ahora integrar en la ropa de intervención diferentes tipos de sensores que faciliten información vital sobre la situación del interviniente en medio de un suceso: su ubicación y también sus constantes vitales, ¿por qué no?.
Las posibilidades
El catálogo de wearables está creciendo rapidísimo. Todavía la oferta actual no da una medida real de adonde puede llegarse. Podríamos señalar algunas de las propuestas:
- Sensores de penetración en la ropa, de tal manera que si un policía es alcanzado por un disparo o penetrada su vestimenta en una reyerta, se podría lanzar de manera automática una llamada al Centro de Control.
- Un rango de tejidos que generen electricidad por los propios movimientos del cuerpo, manteniendo los dispositivos en marcha sin necesidad de llevar baterías extras y cargadores.
- Un protector dental que sirva como un dispositivo de comunicación, mediante la conducción ósea para canalizar las señales a través de los dientes y la mandíbula, transmitiendo sonido incluso en un ambiente ruidoso y
- Camaras de video inalámbricas integradas en gafas o Dispositivos inalámbricos de acceso a móviles, ordenadores, etc.
Aceleradores
Y es seguro que vamos a ver un gran avance en muy poco timpo, básicamente porque la iniciativa surge del Departamento de Seguridad americano, Department of Homeland Security, que ha decidido trabajar este aspecto con «aceleradores», a través de un programa piloto, Emerge, que utiliza aceleradores tecnológicos para atraer y ayudar a startups a desarrollar productos wearable comercialmente viables y adaptarlos para el uso de primeros intervinientes. Nuevamente la colaboración público-privada como estrategia de desarrollo. Tomemos nota.
De acuerdo con Wearable-Technologies, el sector de la seguridad en su sentido más amplio, safety and security, es uno de los segmentos de mercado más interesante para este tipo de tecnologías: armamento y ropas de protección inteligente para trabajadores, personal de rescate y militares; luces de iluminación, dispositivos de comunicación y llamadas de emergencias integrados en la ropa; soluciones especiales para el entrenamiento y la formación de servicios especiales tanto civiles como militares; etc.
La nueva generación de primeros intervinientes de la seguridad pública.